Ophelia de mente, hada de cuerpo

Como el título dice, algo de Ophelia había por ahí...

Ése día estuve metida con Hamlet (de Shakespeare, por supuesto) y cuando salió el nombre de éste personaje femenino, no pude evitar echar a volar hacia aquellos artistas que habían puesto su rostro en pintura, y bueno, aunque ya me los sabía casi de memoria, éso acabó de encender la vela en mi cabeza para que la improvisación de ése día tomara forma.

El cómo acabó transformada en hada... bueno, sinceramente, no lo sé. Cuando me di cuenta, le había añadido un par de alas y me gustó el resultado. Así como otras cosas y accesorios.

Es uno de aquellos recortes de los que estoy bastante orgullosa. Os muestro a continuación la fotillo que le eché al boceto antes de empezar a toquetearlo con mi lápiz cortante.

Los materiales son un basic fino y mi siempre fiel bisturí grande. El tamaño de la figura es algo más pequeño de un DIN A5. Como casi todo, salió del papel sobrante de otros recortes.

Espero que os guste!

Ejercicio de una tarde mal humorada

 

Hasta ahora he ido subiendo cosas al blog que ya os había enseñado previamente (al menos a quienes me tengais en Facebook), pero ésto es algo nuevo.

Me gustaría poder decir que es algo que llevaba mucho tiempo pensado y que le he puesto mucho empeño, pero mentiría. Bueno, no del todo, pero sí en gran medida.

La idea de ésta escena hace un par de días que me rondaba por la cabeza, pero ésta tarde ha sido un mal momento para intentar llevarla a cabo. Me ha pillado de mal humor, aburrida y sin luz natural (es la que mejor me va), y ni siquiera el dibujo me ha salido como yo había imaginado, ni por asomo. Lo he ido cambiando casi todo el rato, transformándolo en algo que lo alejaba de mi idea, y bueno.

Lo considero un ejercicio más que un proyecto.

Aún no está acabado, y no creo que lo termine hoy, pero vete-tu-a-saber si, acabado, el conjunto vale más la pena que el esbozo o lo que ya he hecho.

He hecho un par de fotillos más, en plan detalle, porque me apetecía, pero no traen nada nuevo.

 Ésta es la parte del revés, como los trazos del lápiz os habrán dicho.

Un detalle de lo que, en mi idea, iba a ser la clave del recorte, pero no, al final no.

El papel es un basic de 160 gr, DIN A4 y color blanco.

Pues nada, espero que os guste, aunque mis ánimos sean más parecidos a los nubarrones que teníamos hace un par de días por aquí!

Los inicios

 

 

Vuelvo de nuevo con una de las primerísimas formas que hice.

Tras el castillo que os puse hace poco (que fue lo primero de lo primero, sin boceto, todo fruto del momento), éste pequeño ser salió de los restos de hoja (tamaño DIN A3, grandecita) que me quedaban. Ésto y varias cosas más que ya iré poniendo.

Como veis, es bastante sencillo, y de tamaño, me cabe en la palma de la mano. No tiene muchos detalles, pero consideré que no los necesitaba. Al fin y al cabo, lo que quería era seguir experimentando, de más sencillo, a más complicado.

El material es un basic fino y un bisturí de tamaño grande (el de siempre).

Espero que os guste!

Improvisación!

Tal y como he titulado ésta entrada, el recorte que traigo hoy salió de una idea que tenía en mente y que, sin embargo, no estaba muy segura de cómo plasmarla para que quedara como yo quería.

Técnicamente, el resultado fue mejor de lo esperado o, al menos, se acercó bastante a lo que estaba buscando para un proyecto mayor (que tengo des de hace un par de mesecillos metido en el cajón y de que no hay manera de sacarlo para ponerme con él, todo sea por culpa del palo que me da. Pero le tengo ganas. Pero me da palo. Soy un monstruo, lo sé).

Obviamente, no estoy hablando de lineas rectas, sentidos de profundidad o perspectivas. Fue algo que salió de poco más de diez minutos, estaba on fire con la idea y necesitaba saber si la iba a cagar mucho haciendo lo que tenía pensado.

Es una cosa pequeñita, sencillita, y un poco cutre, pero... resultona para mi. De hecho, para hacerle la foto (si, siguen siendo fotos del movil, ¡tiradme de un puente!), lo puse sobre la cubierta de un pequeño cuaderno (uno de mis cuadernos de artista, si quereis llamarlo así), y me gustó tanto como quedó, que pensé en llevármelo para que me lo hicieran en vinilo ¡y pegarlo despues!

No, no lo hice. La idea estaba ahí, pero la tienda estaba demasiado lejos. Y me daba palo. Otra vez. 

(Soy una vaga de primer nivel, e ahí el motivo por el que no llego a colgar una entrada cada semana)

El papel del recorte es un trozo sobrante de basic fino, con un tamaño que baila entre el DIN A5 y el DIN A6, con el mismo bisturí que en los anteriores.

Espero que os guste!

De pañales y comecocos

Éste recorte es un tanto especial, y aunque la foto no está hecha al final del proceso, si que está la parte recortada, montada y pegada.

Se trata de una pequeña tarjeta de felicitación que le hice a una persona muy especial (uno de los impulsores para que éste blog se hiciera), ya que era su cumple, y aunque se va haciendo mayor (da igual cuánto lo niegues, ahí estoy yo para recordártelo), sigue teniendo la mentalidad y el espíritu de un crío. El tema del portátil era por hacer la broma, para que no hubiera dudas de a quién iba dirigido el mensaje.

Fue un proceso relativamente sencillo, no era muy grande y no había demasiada complicación. Lo más difícil fue ver el dibujo del boceto sobre el papel negro (tuve que encender un flexo para ello, cuando normalmente la luz natural me es suficiente) para cortarlo bien y luego, cortar y pegar ambos colores del portátil. Lo acabé montando sobre un pequeño trozo de cartón pluma y un papel DIN A5 de acuarela, aunque sin pintar. El haberlo elevado medio centímetro ya le daba cierto toque, dependiendo de por dónde le diera la luz.

Ésta vez utilicé un básico más grueso, de unos 180 gr, negro y con un tamaño algo inferior al DIN A5.

Sencillo y personalizado. A mi me gustó, disfruté cortándolo y creo que a ésa persona especial le gustó el concepto.

Espero que os guste!

¡Mi primer recorte!

Si bien mi objetivo era subir ésto hace ya unos días, no me ha sido posible hasta hoy. ¡Lo siento!

Éste recorte me hace especial ilusión porque fue el primero que hice con el bisturí. Antes de eso, lo poco que había recortado era con tijeras y, des de luego, nada por el estilo. Bonito era imaginarlo tiempo atrás...

Fue también gracias a éste recorte, del cual salí muy satisfecha, por lo que me animé a seguir haciendo, intentando complicarme cada vez un poco más, otras veces un poco menos, según me da. Hay muchos errores, pero éste es uno de ésos trabajos en los que agradezco verlos.

Normalmente, tengo por costumbre hacer un boceto antes y luego recortar sobre él, pero éste salió de una tarde de absoluto aburrimiento, sin pretender nada, sin imaginarme nada concreto. A medida que iba recortando, se me iban ocurriendo cosas, aunque luego recortaba otras. Mis manos bailaban solas, nadie les daba ordenes. Y yo encantanda.

El material es un basico fino, color blanco y de tamaño DIN A3 (éste es de los más grandecitos que he hecho por el momento, aunque ya tengo otros proyectos en mente de cierta medida).

¡Espero que os guste!

PD: Lamento la mala calidad de la imagen, ésta foto está hecha con el mobil, y ahora mismo no puedo coger la cámara para hacerlo algo mejor. Cuando pueda, la substituiré.

Tiempo y recompensa

Sé que el nombre del blog puede confundir un poco, pero... y aunque sé que realmente es coger el tema con pinzas para las cejas, he decidido inaugurar éste "mio blog" con ¡un recorte culinario!

(Aunque en éste caso, el salmón no sea el protagonista)

Lo hice hace un par de días, una mañana tranquila, a la luz del sol (la luz de las velas me dejaría ciega intentando dibujar una línia) y tal.

El tamaño es DIN A5, con papel básic fino, y un bisturí con cuchilla de tamaño grande (en realidad, es la única que tengo por el momento).

¡Espero que os guste!